Dios va a dar un golpe de timón




(para discernir)

Ven (...)

Confía siempre en Mí, en lo que te digo para el bien del mundo. 

Es verdad, la maldad está en caída libre y lo iréis viendo a lo largo de los próximos años.

Yo no retiro Mi promesa, como no retiré a Abraham la posibilidad de salvar a las ciudades pecadoras por un puñado de justos. Hoy, como ayer, los buenos escasean, pero ahora hay un número suficiente de ellos para lograr presionar a Dios y detener Su ira. Y te digo que lo habéis conseguido pero tenéis que perseverar rezando al Padre para que los cambios tengan lugar y fructifiquen.

Yo ya te lo he estado diciendo y tú has permanecido casi incrédula porque, en efecto, lo que ya llega no estaba programado, sino que es un golpe de timón que os aleja del abismo infernal y os acerca a Dios.

Esto no quiere decir que la purificación no continúe, y continuen los desastres naturales: todo sirve para elevar el bien en la Tierra y rodear el mal hasta expulsaro paulatinamente de ella

Ven entonces, no juzgues por las apariencias de que nada está cambiando en la Iglesia, sino más bien empeorando. Y así ha de ser hasta que el mal alcance su cúspide. Entonces Yo actuaré, aunque ya estoy actuando a menor escala, cosa que os pasa desapercibida.

Entonces, sostened vuestra fe y vuestra esperanza. Que nadie se retire pensando que los malos han vencido y se han hecho con la Iglesia y con el mundo.

Acontecimientos veréis que os darán otra visión de las cosas. Yo no os adelanto nada, simplemente os pido que mantengáis vuestra fe en el poder de las oraciones que caen copiosas sobre el regazo del Padre.

Ahora es vuestro tiempo, tiempo de batallar con las armas que os he dado: la oración, el rosario, los sacramentos y un propósito firme de cambiar vosotros mismos, ya que es como se opera el cambio que Yo quiero ver establecido en el mundo.

Ven ahora y no esperes más para amarme y alabarme. Yo lo soy todo. (...)





Amame, 

siempre, ahora.

Soy tuyo,


Yo tu Jesús

A un alma mística, 17 marzo  2018