Bergoglio ya era problemático hace casi 30 años
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El padre Jorge Mario Bergoglio no pudo celebrar la Santa Misa en público de 1990 a 1992, escribe Thomas Schirrmacher, presidente de la Comisión Teológica de la Alianza Evangélica Mundial, en su libro "Kaffeepausen mit dem Papst" [Coffee breaks con el Papa] (2017).
Según fuentes que contactaron con es.news, esta información corresponde a la verdad.
Bergoglio tuvo una confrontación muy fuerte con sus cohermanos jesuitas, muchos de ellos antiguos amigos. Fue acusado de ejercer un liderazgo paralelo y causar serias divisiones internas.
Cuando fue nombrado obispo auxiliar de Buenos Aires, quedó totalmente aislado de los jesuitas y se le prohibió pasar la noche en una casa de los jesuitas.