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https://www.lifesitenews.com/opinion/vatican-hostility-against-faithful-catholics-deepens-our-internal-schism
(...)Me preocuparon profundamente dos artículos recientes en publicaciones aprobadas por el Vaticano, que arrojaban acusaciones de hostilidad, odio y división contra fieles católicos.
La primera, del P. Antonio Spadaro y Marcelo Figuero en la revista editada por los jesuitas La Civilità Cattolica, centrada en los estadounidenses. Y la segunda, del P. Giulio Cirignano en la edición del fin de semana de L'Osservatore Romano, centrada en obispos y sacerdotes.
Spadaro y Figuero hacen varias acusaciones contra los estadounidenses, incluyendo:
• "Existe un" ecumenismo de odio "entre los católicos americanos y los evangélicos por su defensa de los no nacidos de los horrores del aborto y su defensa del matrimonio";
• La oposición a la legalización del aborto y el matrimonio homosexual representa "el sueño nostálgico de un tipo de Estado teocrático"
• Referencia a los esfuerzos en la restricción de la inmigración musulmana en América y Europa como una "narrativa del miedo".
Una semana después de esta publicación, en la edición del fin de semana de L'Osservatore Romano, Cirigano afirmó en un ensayo, "El hábito no es la fidelidad: la conversión solicitada por el Papa Francisco", que la agenda del Santo Padre para la Iglesia está siendo puesta en riesgo porque:
"El principal obstáculo que se opone a la conversión que el Papa Francisco quiere traer a la Iglesia sedebe, en cierta medida, a la actitud de una buena parte del clero, en niveles altos y bajos ... una actitud, a veces, de cierre si no de hostilidad ", y " El clero retiene al pueblo, que en su lugar debe estar acompañado en este momento extraordinario.
"Cuando el sacerdote está demasiado marcado por una mentalidad religiosa, y muy poco por una fe límpida, entonces todo se vuelve más complicado", escribió Cirignano. "Se arriesga a seguir siendo víctima de muchas cosas inventadas por el hombre acerca de Dios y su voluntad. "Dios", según Cirignano, "no tolera estar encerrado en esquemas rígidos típicos de la mente humana". Inmediatamente después de describir a sacerdotes no ilustrados, escribió: "En el fondo, el Sanedrín fue siempre fiel a sí mismo, rico en devota obediencia al pasado, confundido con la fidelidad a la tradición y pobre en profecía ".
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Es importante intentar evaluar estas afirmaciones extraordinariamente inusuales, que la mayoría de los obispos, sacerdotes y laicos nunca han visto antes en el Vaticano. En cuanto a su credibilidad, es esencial examinar las respuestas a las acusaciones. Voy a citar sólo varias de las numerosas reacciones que alegan que las acusaciones son extrañas, falsas, sin precedentes e incluso irracionales.
El arzobispo Charles Chaput respondió:
Así que es una sorpresa extraña cuando los creyentes son atacados por sus correligionarios simplemente por luchar por lo que sus Iglesias siempre han sostenido que es verdad.
Robert Royal escribió:
Un católico debe sentirse avergonzado de que una revista supuestamente revisada y autorizada por el Vaticano lleve tan disparates calumniosos.
Austin Ruse escribió en Crisis, "El verdadero ecumenismo que Spadaro y Figueroa omitieron":
Este ensayo sólo puede describirse como un ataque contra mis amigos y contra mí, y mi propio trabajo pro-vida y pro-familia en la ONU, trabajo muy de cerca con los evangélicos y otras creencias. Vemos una guerra contra la creación de Dios y todos los hijos de Dios y debemos trabajar juntos para proteger su creación.
En Catholic World Report, Sam Gregg respondió,
Sin embargo, el mayor daño es la credibilidad de la Santa Sede como un serio contribuyente a los asuntos internacionales. Y eso no beneficia a nadie, y menos aún al Papa Francisco ".
Ross Douthat en The New York Times el 3 de agosto, escribió:
... en su ensayo de los consejeros (del Papa Francisco), en su evidente paranoia sobre lo que están haciendo los americanos, (...)
La respuesta dl P. Mark Pilon en The Catholic Thing a las acusaciones de Cirigano contra los obispos y sacerdotes en L'Osservatora Romano fue:
En mi vida, nunca he presenciado este tipo de hostilidad proveniente de la oficina papal hacia aquellos que están destinados a ser colaboradores en la viña del Señor. Esto se ha convertido en un estribillo frecuente en los propios comentarios del Papa, es decir, que muchos clérigos son rígidos, cerrados y hostiles cuando se trata de su innovadora enseñanza y práctica. Sólo las manipulaciones del Sínodo sobre la Familia y sus resultados, permitieron que estas innovaciones como la recepción de la comunión por los divorciados sin anular, entraran en la exhortación papal."
"El peso de la evidencia indica que las acusaciones principales en estos dos artículos recientes contra americanos y obispos y sacerdotes son falsas. En mi opinión profesional, los autores demuestran dificultad para dominar su ira y por lo tanto en el pensamiento que distorsiona su percepción de la realidad y el juicio justo de otras personas que ellos imaginan como impulsados por la ignorancia o motivos oscuros.
Tales acusaciones, son profundamente perjudiciales tanto psicológica como espiritualmente. Esperemos y oremos para que la ira excesiva del Vaticano disminuya, que el diálogo respetuoso aumente y que tales acusaciones cesen, por el bien de la Iglesia.
Rick Fitzgibbons, M.D. es un psiquiatra en Conshohocken, Pennsylvania